Margarita Toledo recibió 18 puñaladas.

Las investigaciones del crimen de Margarita Toledo, la jubilada mendocina brutalmente asesinada en su departamento de la localidad bonaerense de Berazategui, apunta a una venganza, según las pericias y averiguaciones realizadas por los peritos.
En tanto, las dos mujeres detenidas como sospechosas, se negaron a declarar en las últimas horas y continuarán en prisión acusadas como coautoras de un «homicidio doblemente agravado por ensañamiento y alevosía», informaron fuentes judiciales.
Se trata de Mariel Sauvage y Bárbara Estefanía Cimiotta, quienes optaron por no declarar.
A partir del resultado de la autopsia, que estableció que Toledo, de 80 años, presentaba 18 lesiones punzocortantes, de las cuales la mayoría podrían ser de tortura y sólo tres fueron mortales.
En esta instancia, el fiscal solicitaría este lunes la conversión de las aprehensiones en detenciones ante el Juzgado de Garantías 7 de Berazategui, a cargo de Gustavo Mora.
Las investigaciones, sugieren que el crimen pudo ser una venganza contra el hijo de la víctima, debido a que una de las detenidas lo había denunciado por abuso sexual.