Se trata de la Manuel Corominola Munives. Los padres reclamaron por los hechos de inseguridad. Se llevaron hasta los inodoros.

Padres de la escuela Nº1- 559 Manuel Corominola Munives de Las Heras se manifestaron este martes en la puerta de la escuela para pedir por los frecuentes hechos de inseguridad que es sometido el establecimiento y amenazaron con tomar el edificio.
En lo que va del año ya robaron nueve veces, cuatro de esos robos fueron en la última semana. Desde la Dirección General de Escuelas (DGE) reconocieron el problema al asegurar que “es violentada y vandalizada permanentemente“, por lo que solicitaron colaboración a la comunidad, mientras se suman medidas de seguridad.
“No queda nada, sólo las aulas vacías. Los niños están tomando clases en el suelo porque no quedan ni las sillas”, dijo una mamá, quien afirmó que no van a dejar a sus hijos asistir en esas condiciones.
A la institución asisten unos 500 estudiantes de Primaria y, si bien las clases no fueron suspendidas, pocos alumnos ingresaron esta jornada. En menos de tres meses los malvivientes sustrajeron ventiladores, luminarias, inodoros, el tanque de agua y hasta las rejas del colegio ubicado en calle Cornelio Moyano al 2600.

Un vecino sostuvo que sospechan de adolescentes de la zona. “La misma situación vive la escuela Arrieros del Ande que está a la vuelta”, dijo el hombre, quien aseguró que el barrio suele ser tranquilo, pero estos delincuentes “están ensañados” con los centros educativos.
“Es tierra de nadie, ya saben cómo entrar y hacen lo que quieren”, dijo.
Uno de los hechos más relevantes ocurrió el 13 de marzo, cuando un joven de 19 años fue detenido sospechado del robo. Le incautaron cuatro ventanas, materiales de aula, elementos de higiene, inodoros, ventiladores y plafones LED de techo.
De acuerdo con los padres, el celador que vivía en el lugar terminó renunciando porque amenazaron a su familia, después la DGE designó a un sereno que también terminó dejando el puesto.
“A todos nos da miedo que entren cuando los chicos estén en las aulas. Han dejado todo preparado para volver a entrar”, detalló otra mamá.

“Constantemente golpeada”
Eduardo Andrades, delegado de la Regional Norte de la DGE, explicó que es una escuela “constantemente golpeada” y que es “violentada y vandalizada permanentemente” es por eso que se decidió aumentar la seguridad.
“Se han implementado una serie de marcos de seguridad que no alcanzan. Se había puesto un sereno, pero terminan dejando el trabajo por miedo. Ahora se colocará una pareja para que cubran el turno de 18 a 6”, dijo.
A esto se le sumará la elevación de una pared por la que, entienden, entran los delincuentes y se colocará un sistema de alarma. “Estamos esperando los fondos, aunque no deja todo esto de ser un paliativo”, confesó Andrades.

Para el delegado de la DGE es fundamental que la comunidad escolar y los vecinos se comprometan para hacer propia la escuela.
“Tenemos diálogo con la municipalidad y le vamos a pedir que mejore la iluminación de la zona y que la guardia urbana municipal haga mayor número de rondines”, enumeró.
A su vez, recalcó que se pidió a Infraestructura escolar que ponga en condiciones las dos aulas exteriores que han sufrido el mayor número de violaciones, con el robo de puertas y ventanas, hasta de parte del mobiliario.
“Los supervisores, directivos, maestros y celadores están comprometidos con la escuela. Queremos calmar a los padres para que entiendan que no es culpa de la escuela”, concluyó.
fuente:el sol