
Un impactante caso de pedofilia y grooming ha sacudido a las ciudades de San Rafael y Malargüe en Mendoza. La justicia local, tras una serie de allanamientos, ha detenido a seis personas, entre ellas un candidato político, la dueña de un café céntrico, un profesional, y otros tres implicados, todos acusados de tenencia y distribución de material pornográfico infantil.
En los operativos, que incluyeron 16 allanamientos, las autoridades secuestraron más de 5.000 videos y numerosas fotografías que muestran a menores siendo abusados sexualmente. Además, la investigación reveló que uno de los detenidos se dedicaba a la comercialización de este material, vendiéndolo a través de criptomonedas como Bitcoins y Tether, con precios que oscilaban entre 80 y 100 dólares por video. A este sospechoso se le incautaron cerca de 800 videos en sus dispositivos electrónicos.
El caso ha generado conmoción, especialmente tras la detención de una joven de 28 años, dueña de un café en San Rafael, quien enfrenta 34 cargos relacionados con la posesión de material de abuso sexual infantil. La detención de esta mujer, en un local ubicado en una esquina frente a la plaza principal, fue uno de los momentos más resonantes del operativo. Aunque la vinculación entre los acusados aún no está del todo clara, la pequeña dimensión de la ciudad hace que algunos tengan conexiones laborales o sociales entre sí.
Entre los detenidos también se encuentra un joven de Malargüe, acusado de grooming. Este individuo se hacía pasar por una niña en redes sociales para engañar a un menor de 10 años de Tandil, incitándolo a enviarle fotos explícitas.
El fiscal Javier Giaroli, encargado de la causa, ha señalado que las pruebas presentadas por una ONG especializada en combatir la explotación infantil fueron clave para el avance de la investigación. Esta organización aportó cerca de 100.000 archivos que documentan abusos sexuales a menores.
Las penas que enfrentan los acusados son severas, con un mínimo de 4 años de prisión y un máximo que podría alcanzar los 50 años, dependiendo de los cargos acumulados y la gravedad de los hechos. Dado que los delitos imputados no son excarcelables, en caso de ser condenados, los acusados deberán cumplir su sentencia de manera efectiva.
Este caso pone de relieve la gravedad del delito de pedofilia en la región y el compromiso de las autoridades en erradicar estas prácticas aberrantes, utilizando todos los recursos a su disposición para llevar a los culpables ante la justicia.