
En un operativo que involucra a policías, bomberos, integrantes de Defensa Civil y Prefectura Naval, se lleva a cabo un intenso rastrillaje en la zona del puente de Balsa Las Perlas, en el límite entre las provincias de Neuquén y Río Negro, para localizar a una niña de 10 años que fue arrastrada por la corriente del río Limay.
El trágico episodio ocurrió en la tarde del martes, mientras la menor disfrutaba de un día junto a su familia en las orillas del río. Cerca de las 19:30, las autoridades recibieron el aviso de desaparición tras confirmarse que la niña había sido arrastrada por una fuerte corriente.
Heroico rescate del hermanito
Según trascendió, el padre de la menor logró salvar a su otro hijo, quien también estaba en el agua en el momento del incidente. Sin embargo, no pudo alcanzar a la niña, que fue arrastrada rápidamente por la fuerza del río.
Amplio despliegue de búsqueda
Desde las primeras horas del miércoles, un equipo compuesto por fuerzas de seguridad y especialistas en rescates fluviales trabaja intensamente en el área para dar con el paradero de la niña. Las tareas se concentran en las inmediaciones del puente de Balsa Las Perlas, un sector conocido por sus corrientes impredecibles y su peligrosidad durante esta época del año.
La operación incluye patrullajes en embarcaciones, recorridos terrestres y buzos especializados que inspeccionan zonas profundas del río. También se están utilizando drones para explorar áreas de difícil acceso y ampliar el alcance del operativo.
Advertencias sobre la peligrosidad del río
El río Limay es conocido por su belleza, pero también por su fuerza y los riesgos que representa, especialmente tras lluvias recientes o cambios en los caudales. Las autoridades reiteraron la importancia de respetar las señalizaciones y evitar zonas no habilitadas para el baño, así como extremar la supervisión de menores en las cercanías de cursos de agua.
Familiares y vecinos en vigilia
Mientras continúa la búsqueda, los familiares de la niña y vecinos de la zona permanecen en las inmediaciones, con la esperanza de obtener noticias favorables. La comunidad local también se ha sumado en solidaridad, aportando información sobre posibles puntos de referencia en el río que podrían ser clave para la localización.
La trágica desaparición pone en evidencia los riesgos asociados a los entornos fluviales y la necesidad de reforzar las medidas de seguridad en zonas recreativas. Las tareas de búsqueda continuarán durante toda la jornada, y las autoridades han asegurado que no cesarán hasta agotar todos los recursos disponibles.