
El estadio Juan Domingo Perón, de Instituto de Córdoba vive una noche histórica: la gran Final de la Copa Argentina, en un duelo inédito que enfrenta a Independiente Rivadavia y Argentinos Juniors. Ambos comparten un mismo anhelo: conquistar su primer título en esta competencia y la clasificación a la Copa Libertadores.
Primer título para la Lepra, que lo ganaba 2-0, se quedó con nueve, se lo empataron en el final y se coronó desde los doce pasos
Independiente Rivadavia comenzó mejor el encuentro y a los ocho minutos aprovechó una floja reacción de Chiquito Romero tras un centro desde la derecha de Osella y Arce abrió el marcador de cabeza.
Argentinos emparejó el juego con el correr de los minutos y se adueñó de la pelota, aunque no llevó demasiado peligro al arco defendido por Ezequiel Centurión.
A los 40 minutos, la Lepra se quedó con diez jugadores por la expulsión de Amarfil por doble amonestación.
A los 62′ Villa sacó un contragolpe letal, Matías Fernández enganchó dentro del área y punteó la pelota para definir al primer palo ante un Romero estático que nada pudo hacer para evitar el 2-0.
Lejos de derrumbarse, el Bicho respondió rápidamente. Giaccone habilitó a Lescano y el 10 definió de primera ante el achique de Centurión para achicar la diferencia.
A la media hora de la segunda mitad, Berti se cruzó con López Muñoz y Ramírez expulsó al entrenador de la Lepra, que explotó contra el árbitro y sus asistentes, fue a encararlos y los insultó de arriba a abajo antes de dejar la cancha.
A los 90′, Centurión chocó con Molina y debió dejar la cancha. En su lugar ingresó al arco Gonzalo Marinelli.
Independiente Rivadavia aguantaba como podía y todo se hizo aún más cuesta arriba cuando a los 92′ Osella vio su segunda amarilla y dejó con nueve hombres a su equipo.
En el séptimo de los quince minutos adicionados, Godoy encontró un rebote en la puerta del área chica y no falló: agónico empate 2-2 y definición desde el punto penal.