En una reciente entrevista con Bloomberg, el famoso empresario y cofundador de Microsoft, Bill Gates, expresó sus preocupaciones sobre el bitcoin y advirtió sobre los riesgos asociados con esta criptomoneda. Gates, actualmente el quinto hombre más rico del mundo, hizo hincapié en que el bitcoin no es adecuado para cualquier tipo de inversor y cuestionó su valor, especialmente en comparación con la riqueza y sofisticación financiera de figuras como Elon Musk.
«Elon tiene toneladas de dinero y es muy sofisticado, así que no me preocupa que su bitcoin suba o baje aleatoriamente. Si tienes menos dinero que Elon, probablemente deberías tener cuidado», afirmó Gates, destacando los altos riesgos de la volatilidad del bitcoin.
El magnate también abordó aspectos más generales de las criptomonedas, señalando la falta de regulación y el potencial de uso indebido, especialmente en el contexto de transacciones anónimas e irreversibles. Gates manifestó su preocupación sobre el anonimato asociado con ciertos activos digitales y advirtió contra aquellos que podrían evadir impuestos o reglas gubernamentales.
En otra entrevista, Gates hizo comentarios críticos sobre las criptomonedas y los NFTs, clasificándolos como «una clase de activos que se basa al 100% en algún tipo de teoría del más tonto de que alguien va a pagar más». Además, dejó claro que no se involucrará en activos que posean «una especie de anonimato que evita impuestos o cualquier tipo de reglas gubernamentales», ya sea para operar al alza o a la baja.
La opinión de Gates se une a la de otros líderes destacados del mundo corporativo convencional, como Warren Buffett, Charlie Munger y Jamie Dimon. Buffett, director de Berkshire Hathaway, afirmó que no pagaría ni USD 25 por todos los bitcoins del mundo, mientras que Munger expresó su desdén por el éxito de Bitcoin, calificándolo como útil para criminales. Por su parte, el actual director ejecutivo de JP Morgan Chase & Co., el banco más grande del mundo, reafirmó la creencia de que las criptomonedas carecen de valor intrínseco.
En conjunto, estas opiniones reflejan la postura cautelosa de importantes figuras financieras y empresariales hacia el bitcoin y las criptomonedas, resaltando la necesidad de abordar la volatilidad, la falta de regulación y los riesgos asociados con estos activos digitales.