La puja entre Alfredo Cornejo y Omar De Marchi comienza a definirse. Las Heras, Luján y Rivadavia, las peleas de semifondo. Las preguntas que sólo se responderán con la certeza de los votos.
Una semana falta para las PASO en Mendoza que comenzarán a definir quién será el próximo gobernador. Más allá de las encuestas, de las recorridas, las visitas de las figuras nacionales y de los cruces feroces por redes sociales, hay al menos cuatro escenarios sobre los que posar la mirada, puesto que definirán cambios importantes luego de estos comicios.
La madre de las batallas
El primer escenario es, por supuesto, el provincial. La madre de las batallas entre Alfredo Cornejo y Omar De Marchi. El segundo dejó Cambia Mendoza, pateó el tablero electoral y fundó nuevo frente con aliados impensados, como el intendente de Las Heras, Daniel Orozco, y la inclusión de varios referentes peronistas.
Las encuestas previas dan cuenta que el primer puesto lo tiene asegurado el ex gobernador radical. Pero la pregunta es cuánta diferencia podrá sacar Cornejo -y Cambia Mendoza- ante De Marchi, en un panorama donde algunos advierten que incluso Luis Petri, a bordo de su fitito rojo bautizado La Petrineta, puede tener mejores números que los previstos. En este caso ¿A quién le muerde esos votos el ex diputado nacional?
De igual forma para De Marchi. Dado que sumó a Las Heras, con la maquinaria municipal a su favor, el interrogante es cómo fungirá en votos la compleja ingeniería a forceps que ha diseñado. A diferencia de Cornejo con Petri, no va a internas, por lo que tiene que apalancar la mayor cantidad de votos para mantenerse competitivo hacia la próxima elección. La campaña ha girado alrededor de De Marchi. Los radicales han salido con los tapones de punta contra Orozco -principalmente-, pero también contra figuras peronistas que quieren volver, Jorge Omar Giménez, pero que en sus últimos roles no pudieron siquiera dar certezas -el tren Retiro-Mendoza, que finalmente llegó el sábado-. De igual manera el kirchnerismo duro ha salido a fustigarlo, porque entiende que lo deja en un tercer lugar entre las opciones.
También en este teatro de operaciones hay preguntas para un peronismo que, más allá de quien triunfe en la interna entre Omar Parisi y Guillermo Carmona, no puede dejar de sentir el fuego amigo del Gobierno nacional. Entonces ¿qué tanto tirará hacia abajo la Casa Rosada a un peronismo que tuvo -en una de sus mitades- dudas de ir a las PASO y que hasta se mostró en campaña con De Marchi?
Las Heras
Epicentro de la campaña más virulenta. El radicalismo fue golpeado profundamente con el pase de Orozco a La Unión Mendocina. Lo que motivó que los cuestionamientos fueran sin ambigüedades hacia el médico, al que tiraron de “traidor”. Cornejo mismo le dio un lugar preponderante en su campaña, lo que muestra a las claras la importancia de este distrito.
En el condado, dos ex funcionarios de la gestión de Orozco tendrán que definir quién pasará el filtro por Cambia Mendoza: el cornejista Francisco Lo Presti y el cobista Daniel “Oso” Tello. Por el lado de LUM, el intendente no pudo imponer a su propio candidato, el concejal Martín Bustos, y arriesga el poder construido estos 8 años ante el ex ministro de Transporte Diego Martínez Palau.
Habrá que ver cómo se comporta el domingo el peronismo, que cedió el poder hace 8 años, y que tendrá una interna importante. Se destaca en primer lugar Rubén Miranda, el ex intendente que hoy está encolumnado en el massismo. Otro es Carlos Gallo, actual gerente regional de la ANSES y uno de los funcionarios más encumbrados de La Cámpora Mendoza. Los otros dos candidatos son la senadora provincial Adriana Cano -ciurquismo- y el referente de los movimientos sociales, Daniel Urquiza -Movimiento Evita-.
Luján
Aunque a priori no parece que puedan tener una victoria comprometida, en un departamento que se reordenó luego de la crisis en la que terminó la gestión de Carlos López Puelles, el escenario en Luján también es atractivo.
Una de las sorpresas en la campaña fue el hecho de que el intendente Sebastián Bragagnolo declinó de ir por su reelección. El elegido fue el jefe de gabinete, Esteban Allasino.
De bajo perfil y con un rol más técnico que político, el funcionario demarchista supo ganar su lugar y la confianza de Bragagnolo y ODM. Aunque no es tan conocido, Allasino llevará en la boleta al fundador de LUM para reforzar su performance, lo que le otorga cierta ventaja.
Enfrente, el radicalismo le colocó a un rival que viene de la gestión desde hace casi 8 años, Natalio Mema, el secretario de los Servicios Públicos. Aunque tiene varios funcionarios de peso viviendo en esa comuna, la UCR no ha logrado ser competitiva en Luján. La campaña se volvió virulenta cuando Cambia Mendoza llevó a Horacio Rodríguez Larreta, una forma de mojarle la oreja a ODM. Lo que en definitiva se pone a prueba en este escenario es el modelo de gestión del demarchismo en estos últimos 8 años.
Rivadavia
En el Este, es el único departamento que ha generado ruido y que Cambia Mendoza no pudo ordenar. Al igual que Las Heras, es un todo contra todos, pero principalmente radicales aunque no en el mismo frente.
El intendente Miguel Ángel Ronco optó por elegir como sucesor al diputado provincial Mauricio Di Césare. La definición no cayó nada bien en la interna y el concejal Hernán Amat salió a contradecir a Ronco. Las denuncias de que la maquinaria municipal jugó a favor del candidato oficialista con todo tipo de mañas estuvieron a la orden del día.
La sucesión de Rivadavia, que el radicalismo viene gobernando desde hace dos décadas, está en juego. Quien compromete la hegemonía es un ex intendente radical, Ricardo Mansur, peleado con sus ex correligionarios y que hace dos años tuvo una buena elección legislativa por el Partido Verde. Mansur fue jefe comunal durante 12 años, pero en este caso irá a la elección con partido departamental, Sembrar. Se cortó solo, incluso, del Partido Verde.
Tanto arriesga Ronco en esta elección que se jugó por congelar su propio sueldo como propuesta de campaña. Una jugada que llegó al menos tarde, ya que en su momento fue denunciado por Mansur por cobrar más que el gobernador.
El arrastre de los intendentes
Otra pregunta que responderán finalmente los votos es la cantidad que aportarán aquellos intendentes que, al no poder ir por una nueva reelección, son candidatos a la Legislatura. De igual manera, nutrirán a la lista provincial encabezada por Cornejo.
Es el caso de Marcelino Iglesias, Walther Marcolini, Gustavo Soto y el mencionado Ronco.
En el caso de Guaymallén, Iglesias optó por Marcos Calvente, su secretario de Servicios Públicos. Aunque se descarta a priori una victoria, habrá que ver cómo reacciona el votante en medio de las quejas por la demora en la reparación de las calles y el caso de la constructora de los hermanos Paco. Con Guaymallén, Cornejo buscará equiparar la tracción que perdió en Las Heras porque ya no lo tiene a Orozco de su lado.
En Alvear, Marcolini hará más competitiva la lista de su candidato, Jorge Pérez, secretario de Obras. Pero prácticamente quedaron solos porque el cornejismo le puso enfrente a Alejandro Molero, titular del Iscamen.
