Se trata de Bahiano Guardia Reale, quien escapó durante una salida transitoria en julio del año pasado. Este miércoles, lo atraparon en la Galería Tonsa, donde se desempeñaba como arbolito. Aseguran que también era parte de la interna que atraviesa la hinchada de Independiente Rivadavia.
Hace casi un año, un preso conocido como el Bahiano -su nombre real- purgaba una condena por un intento de asesinato en la Unidad 14 de Régimen Abierto de Autodisciplina, un sector del penal El Borbollón destinado a internos que están a punto de cumplir la pena o que cuentan con el beneficio de las salidas transitorias.
Este último era el caso de Bahiano Francisco Daniel Guardia Reale, quien, gracias a su comportamiento, había accedido a ese régimen carcelario. Sin embargo, durante una de esas salidas, el reo debía volver a su lugar de alojamiento el 18 de julio y no lo hizo.
Las autoridades penitenciarias dieron aviso al Juzgado de Ejecución Penal Nº 1, que estaba a cargo de su seguimiento, y se pidió su captura por el delito de evasión. Luego de más de once meses de búsqueda, fue recapturado la tarde del miércoles en la Galería Tonsa de Ciudad.
Pese a que Guardia Reale se encontraba en la orden del día y que era buscado por distintos sectores de la Policía, no se vio imposibilitado a moverse en el ambiente delictivo del Gran Mendoza.
Fuentes investigativas consultadas revelaron que, para poder subsistir, se dedicó de lleno a la compra y venta de dólares, trabajando como arbolito, motivo por el que frecuentaba diferentes cuevas de cambio del microcentro mendocino.
Eso no es todo, la información agrega que también era visto en cada partido que Independiente de Rivadavia disputaba en el estadio Bautista Gargantini. Aparentemente, había creado fuertes lazos con facciones de la hinchada y hasta se encontraba disputando el liderazgo de la barra brava, que recientemente quedó acéfala luego de detención en un procedimiento narco de Federico Agustín Cano, sindicado Nº 1 de los Caudillos del Parque.
Por eso, los policías que estaban tras los pasos de Guardia Reale sabían que era peligroso, ya que contaba con antecedentes por diversos delitos: robo agravado y robo simple en grado de tentativa (2016); hurto agravado y abuso de armas (2017) y homicidio agravado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa (2018), hecho por el que fue condenado y se encontraba tras las rejas.
Lo cierto es que, cerca del mediodía del miércoles, una oficial inspector y un auxiliar que se encontraban de franco de servicio detectaron la presencia del Bahiano en la citada galería céntrica, vestido con un buzo bordó de River Plate.
Ya que ambos efectivos tenían conocimiento de que Guardia Reale se encontraba prófugo, le dieron aviso telefónico a colegas de la Unidad Investigativa Departamental Godoy Cruz (UID), quienes se dirigieron hasta la Tonsa.
Teniendo en cuenta de que su prontuario, fueron advertidos de que podía estar armado, por lo que realizaron discretas tareas de observación por los pasillos de la galería. Valiéndose de las fotos que les aportaron, pudieron encontrarlo mientras caminaba por la planta alta, dirigiéndose hacia las escaleras del centro de ese centro comercial.
Cuando bajó las escaleras, uno de los sabuesos de la UID lo siguió a corta distancia, mientras que otro lo interceptó de frente. Luego de identificarse como policías, lo aprehendieron y trasladaron en una movilidad hasta la Comisaría Tercera, donde quedó a disposición del juez Sebastián Sarmiento, quien resolverá su situación carcelaria en las próximas horas.
fuente:el sol
