Se trata de Walter Eduardo Montoya, de 52 años, quien se encontraba bañándose dentro de la cárcel cuando se descompensó; fue trasladado de urgencia por personal penitenciario al hospital Schestakow y al arribar se constató que estaba sin vida.
El fallecido cumplía condena por haber asesinado a su madre Elsa Dora Olivera, de 85 años en la residencial «La Esperanza» de Avellaneda al 200, el 6 de noviembre de 2013. El hombre que, trabajada como taxista, habriá estrangulado a su progenitora y luego dio aviso a la policía.