Durante la tarde del miércoles, un video se viralizó a través de las redes sociales de un caballo que podría estar cursando un posible caso de encefalomielitis equina, en el distrito de Las Malvinas.
Tras las especulaciones, MinutoYA, dialogó con Miguel Machin, médico veterinario del Senasa, para esclarecer la situación y determinar que el animal tenga esta enfermedad.
Según pudo informar Machin «el productor se comunicó con Senasa, y nosotros lo orientamos a como realizar las medidas para su confirmación pero hasta el momento no está confirmado»
El médico veterinario también explicó: «en la provincia de Mendoza ya se encuentran casos positivos de encefalomielitis, por lo que toda la región ya está bajo alerta es por eso que no se realizan pruebas. Los equinos infectados son diagnosticados por un médico veterinario particular y luego el mismo profesional los carga en una base de datos del Senasa para su posterior atención.»
¿Que es la Encefalomielitis Equina?
La encefalomielitis equina es una infección viral causada por un virus de la familia Togaviridae, que se transmite por la picadura de mosquitos, la cual puede generar diversos problemas entre caballos y seres humanos, provocando desde episodios de fiebre, hasta la muerte, con base a la inflamación del cerebro.
En humanos, la misma tiene un período de incubación de 2 a 10 días. La mayoría de los casos son asintomáticos o se presentan como cuadros leves con fiebre, cansancio, dolores musculares y malestar general, que se resuelven espontáneamente entre 7 y 10 días.
¿Cómo saber si un caballo presenta síntomas de la enfermedad?
Los síntomas de la enfermedad pueden incluir la aparición súbita de fiebre, escalofríos y dolores musculares o articulares. Los casos con enfermedad grave pueden comenzar con fiebre, dolor de cabeza y vómitos, que pueden progresar a desorientación, convulsiones y coma.
¿Cuales medidas de prevención se recomiendan?
Saneamiento ambiental de los predios donde se alojan caballos y personas asociadas a dicha actividad.
Drenaje o rellenado de espacios de anegación temporaria que puedan servir como sitio de oviposición para las hembras de esta especie.
Desmalezado del peridomicilio y predios verdes para disminuir la presencia de mosquitos adultos.
Protección personal de quienes trabajan o viven en las inmediaciones de lugares propicios para el desarrollo de mosquitos y donde se alojan caballos, incluyendo el uso de ropa de trabajo clara y de manga larga y utilización de espirales en el exterior y pastillas o aerosoles en el interior de las edificaciones, y la aplicación periódica de repelentes de insectos con el ingrediente activo DEET (N,N-dietil-meta-toluamida) mientras se realizan tareas en el exterior o dentro de establecimientos de animales. Es necesario volver a aplicar el producto periódicamente.
La cantidad de horas entre las aplicaciones dependerá de la concentración de DEET del producto empleado. Un producto con 30% de DEET debe ser aplicado cada 6 horas, mientras que uno que contiene 10% de DEET debe ser renovado cada 2 o 3 horas. También pueden utilizarse repelentes que contengan IR3535 o icaridina.